sitios de interes

martes, 21 de mayo de 2013

Epístola: Eternamente tú.

Siempre te he estado observando. Tú siempre brillabas, eso me hacía feliz, por eso te seguía. Quería que hablaras conmigo pero por mucho que corriera no podía alcanzarte; debería haberlo sabido desde el principio... pero quería verte con una sonrisa en la cara.

No me acuerdo de cuando se complicó todo, era divertido estar contigo y pasamos tantos moementos juntos... fuera cual fuera el problema cuando hablaba contigo desaparecía. Eres inteligente, guapa y muy responsable, quizás por eso nunca más podré atraparte.

No podré camionar al lado de la persona que más quiero. No importa, te observaré desde lejos, por eso no te preocupes por mí, sabré cuidar de mí mismo. Solo quiero pedirte un favor: quiero que siempre sonrías; porque eres a quien más quiero, porque todo lo que fuiste y siempre serás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario